Según la teoría del pico de Hubbert, también conocida como agotamiento del petróleo, es una teoría acerca de la tasa de agotamiento a largo plazo del petróleo y los combustibles fósiles. Predice que la producción mundial de petróleo llegará a sus máximos y después declinará como creció. Quedándonos sin otra opción que buscar las energías del futuro.

El año de pico máximo no se ha establecido con precisión, aunque la Asociación para el Estudio del Pico del Petróleo y el Gas (ASPO en inglés), considera que el pico del petróleo habría ocurrido en 2010,mientras que el del gas natural ocurriría algunos años más tarde.

A día de hoy, el 97% de la energía proviene de los combustibles fósiles: 38% carbón, 40% petróleo y el 19% de gas natural. Se estima que el petróleo acabará desapareciendo en unos 50 años aproximadamente, y al gas natural se le calcula unos 65 años más.

Por ello, se está planteando un futuro energético diferente y estas podrían ser las potenciales candidatas.

Las energías del futuro:

Energía solar:

La energía solar es la energía más popular como candidata del futuro. En los últimos años ha avanzado muchísimo y aún le queda por avanzar. Pudiendo posicionarse como unas de las más rentables y además, renovable. Lo que ya está claro, es que instalar placas solares en el hogar es una inversión a medio-largo plazo y aporta dos valores importantes a la economía familiar:

Obtención de energía limpia para autoconsumo eléctrico.
Ahorro considerable en consumo eléctrico una vez amortizada la instalación.

Biomasa:

Los biocombustibles o biomasa liberan energía química al quemarse y producen calor. Es renovable, aunque no es limpia ya que cuando se quema produce CO2. Estas consecuencias se tratan de paliar plantando árboles de rápido crecimiento y otros arbustos que “limpien” en ambiente y luego sirvan de materia prima para la biomasa.

Eólica:

La energía eólica ha sido la segunda fuente de generación eléctrica peninsular en España en 2020, convirtiéndose en el 5º país del mundo por potencia eólica instalada. A nivel mundial, creció un 53% en 2020, siendo el mejor año de la industria eólica mundial.Este crecimiento posiciona sin duda alguna, a la energía eólica como una energía para el futuro. Actualmente, se está estudiando crear unos aerogeneradores flotantes, que estarían a más de 5000 metros, por lo que el flujo del aire sería constante y acabaría con la dependencia de situar esta energía sólo en lugares ventosos.

Fusión nuclear:

A día de hoy, se utiliza la energía de fisión nuclear, no es barata y contamina por milenios, pero se está estudiando unir estos 2 procesos (fusión y fisión) para producir 4 veces más a cambio de pocos residuos.

Hidroeléctrica:

Actualmente, alrededor del 20% de la energía eléctrica de nuestro país proviene de la hidráulica. A pesar de la caída en la demanda de combustibles fósiles, la energía hidroeléctrica generó un récord de 4.370 teravatios hora (TWh) de electricidad limpia a nivel mundial. La Agencia Internacional de Energía (AIE) dice que quiere duplicar el tamaño de esta energía a 2.600GW. Esto se traduciría en producir la misma cantidad de capacidad en los próximos 30 años que se construyó en los últimos 100 años.

Como podemos ver, debido a la escasez de los combustibles fósiles, se está potenciando el uso de energías alternativas. La mayoría de las energías son renovables, aunque no todas son limpias. De todas maneras, hay que resaltar que estas energías son menos contaminantes que los combustibles fósiles y tenemos que buscar alternativas para paliar la escasez y los problemas medioambientales.

Si te interesa saber cómo empezar a usar tu mismo la energía solar te invitamos a leer este artículo: Energía solar: todo lo que debes saber para empezar a generar tu propia electricidad